Primero, quiero decir que los nuevos estudiantes son muy afortunados por estudiar en Madrid. Digo eso porque Madrid es una ciudad preciosa, con una arquitectura buenísima y única, una cultura vibrante y gente muy maja. Por eso, mi primera recomendación es que ellos no deben coger el metro a todos los lugares. Creo que es mejor andar por todas partes de Madrid para aprender su geografía, ver la arquitectura, y también ver las personas por la calle (en inglés nosotros decimos “people watching”). Yo estaba acostumbrada a coger el metro a todas las partes de Boston, y por eso, siempre cogía el metro aquí también, hasta que uno de mis amigos en Madrid me llevó a un sitio en Chueca para comer. Yo no sabía que Chueca está muy cerquita del centro del programa hasta esta vez. ¡Desde Colón a Chueca, el metro tarda más del doble!
Mi segunda recomendación es que ellos deben pedir a sus padres que les visiten. Es muy divertido actuar como guía de la ciudad, y enseñar todas las cosas que se han aprendido. Cuando mis padres vinieron, les mostré el centro del programa, mi casa en Alcalá, y casi toda la ciudad de Alcalá y todo lo que pude sobre Madrid. A ellos les encantó dar un paseo por el retiro y remar en las barcas en el estanque.
Pero lo que es muy importante es que ellos deberían visitarles antes de la Semana Santa, y no durante o después. Durante la Semana Santa, casi todo el mundo viaja a otras partes de España o Europa. Por eso, casi todos los estudiantes del programa viajaron juntos durante esta semana, y me imagino que nadie quiere ser excluido de esta oportunidad. Y después de la Semana Santa, como es casi el final del semestre, normalmente muchos estudiantes tienen mucho trabajo o exámenes finales.

Neethu Putta. Tufts en Alcalá. Primavera de 2012.